los primeros románticos le daban gran valor a su propia eran muy propensos a la creación de lo ,Ilicialmente genuino», es decir, las imposturas. Una impostura ,f la era Ossian, un bardo gaélico ficticio, creado por el maestro scuela de Edimburgo James Macpherson (1736-96). Sus ,payas folk» Fingal y Ternora causaron sensación en Escocía, le los patriotas de la Ilustración David Hume y Adam Smith los liaron con entusiasmo, Ossian rápidamente se hizo famoso en Europa. Schiller elogió su obra y Goethe hizo que su héroe rtico Werther citara al bardo extensamente. También
innleón fue un gran admirador.
Thomas Chatterton (1752-70) fraguó manuscritos medievales el nombre de Thomas Rowiey, un ficticio poeta de Bristol, del si XV. Se seguía debatiendo sobre ellos cien años después de la muerte de Chat1erton. Escritos cuando él sólo contaba doce aM los poemas de s Rowley» eran imposturas tan buenas que engañaron a escritores de la inteligencia de Horace Walpole. P
la obra de Chatterlon no fue un éxito, y él se suicidé a la edad de años. Su muerte solitaria, por inanición en una choza, se convirti en la imagen emblemática del sufrido artista romántico.
